Definición de tos crónica
Una tos es un “empujón” contundente de aire exhalado que se realiza de forma voluntaria o como una acción refleja (involuntaria). Por lo general, se considera tos crónica cualquier tos que persista durante más de 3 meses. Puede ser constante, donde el paciente tose cada pocos minutos o puede ser episódico, donde un paciente entra en un ataque de tos y luego cede. Una tos crónica suele ser persistente porque la causa de la tos puede ser un trastorno crónico o el paciente está constantemente expuesto a los mismos factores que pueden desencadenar la tos.
Tipos de tos
En términos generales, la tos se puede dividir en:
- Tos seca , tos no productiva, en la que no se produce moco ni se expele.
- La tos húmeda , o tos productiva, es cuando hay moco presente, ya sea escuchado en los pulmones o las vías respiratorias (pecho) o tosido en la garganta o boca.
Causas de una tos persistente
Bronquitis crónica
La bronquitis crónica es la causa más común de tos persistente y generalmente se debe a causas físicas o mecánicas más que a una infección. Por el contrario, la bronquitis aguda suele ser el resultado de una infección del tracto respiratorio superior.
La tos asociada con la bronquitis crónica se conoce comúnmente como ” tos del fumador ” debido a la prevalencia de esta afección en los fumadores de tabaco. Fumar conduce a bronquitis obstructiva crónica, un tipo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), que resulta en una pérdida de elasticidad de los pulmones, inflamación de las vías respiratorias con producción de moco y destrucción de los sacos de aire en los pulmones. El carraspeo frecuente, la dificultad para respirar ( disnea ) y la dificultad para respirar, especialmente durante el sueño, son los síntomas más comunes que acompañan a la tos húmeda persistente en la bronquitis crónica.
Tos postinfección del tracto respiratorio
Esta tos generalmente persiste durante unas semanas o meses después de una infección del tracto respiratorio o una infección generalizada que afecta el tracto respiratorio, como la gripe estacional (influenza). Es más común después de una infección viral del tracto respiratorio y generalmente la tos es seca o no productiva.
Fiebre del heno y goteo posnasal
La causa principal de estas afecciones es una reacción alérgica y pueden presentarse los síntomas típicos de una alergia. Estornudar al despertar por la mañana, ojos rojos con picazón (especialmente después del anochecer), congestión nasal y sensibilidad a factores ambientales, físicos y, a veces, ingeridos (alimentos) indican la presencia de una alergia que afecta el tracto respiratorio superior. La tos en el goteo posnasal suele ser seca y es el resultado de un “cosquilleo” del moco en la parte posterior de la garganta. Por el contrario, la tos no es común en la fiebre del heno, donde el moco se expulsa por la nariz (‘secreción nasal’). Si el moco del goteo posnasal entra en las vías respiratorias inferiores y se deposita en los pulmones, la tos puede ser productiva o húmeda.
Asma
Los asmáticos pueden toser en respuesta a la exposición repentina a ciertos factores desencadenantes como el ejercicio, los alérgenos inhalados (en el aire), los alérgenos ingeridos (alimentos y bebidas), los factores ambientales (generalmente un frío intenso), al despertar del sueño y el estrés. Si la exposición al factor desencadenante persiste, las sibilancias pueden volverse evidentes al toser, dando un tono ligeramente agudo a la tos con dificultad para respirar.
Causas gastrointestinales
Una tos crónica puede desarrollarse en la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) y es prominente en la mañana, después de despertarse, debido a la irritación de la faringe (parte posterior de la garganta) por el contenido gástrico (alimentos y ácidos parcialmente digeridos) mientras se duerme. También puede ocurrir tos en la ERGE durante o después de un episodio de reflujo “acidez de estómago”. Otras afecciones gastrointestinales que pueden causar aspiración (alimentos o líquidos que ingresan al pulmón desde el esófago) también pueden causar tos.
Infecciones
Las infecciones a largo plazo como la tuberculosis (tuberculosis) y las infecciones respiratorias por hongos, como la neumonía por Pneumocystic carinii, pueden causar tos crónica. Esto es más común en pacientes inmunodeprimidos, como el VIH / SIDA, y puede ir acompañado de otros síntomas como sudores nocturnos, tos con sangre (hemoptisis), fiebre, pérdida de peso y linfadenopatía generalizada (ganglios linfáticos agrandados en todo el cuerpo). La tos ferina, o tos ferina, es otra causa infecciosa de tos crónica y se observa con mayor frecuencia en los niños. Las causas infecciosas de una tos crónica suelen provocar una tos húmeda.
Drogas
Se sabe que ciertos medicamentos, como los inhibidores de la ECA, que se usan en afecciones cardiovasculares, especialmente la hipertensión, causan tos crónica. Este suele ser un efecto secundario del medicamento y desaparece al suspender el medicamento.
Falla cardiaca
La insuficiencia cardíaca puede ser una afección de progresión lenta que causa un derrame pleural (“agua en los pulmones”) y esto produce dificultad para respirar (disnea), una tos seca con el sonido de burbujeo en los pulmones al respirar (crepitaciones).
Tumores
Esta es una causa poco común de tos crónica y se presenta con muchos de los signos y síntomas evidentes en una infección.
Otras causas
Las causas raras de tos crónica incluyen cálculos de amígdalas , amigdalitis crónica y agrandamiento de la glándula tiroides (bocio) donde la sensación constante de un objeto en la garganta (sensación de globo) puede resultar en una tos persistente. La fibrosis quística y las causas psicógenas son causas poco frecuentes de tos crónica y pueden verse con más frecuencia en los niños.
Investigación diagnóstica de tos crónica
Una radiografía de tórax es la herramienta de diagnóstico más común que se usa al investigar una tos crónica. Junto con el historial médico del paciente, los signos y síntomas, así como los hallazgos clínicos durante el examen físico realizado por un médico, la causa de la tos crónica puede aislarse. Es posible que se necesiten investigaciones adicionales como pruebas de alergia (asma, goteo posnasal), broncoscopia y endoscopia (causas gastrointestinales) y pruebas de esputo (tuberculosis, infecciones fúngicas, tos ferina) para diagnosticar la causa de una tos crónica.